Todas las pruebas expuestas durante tres jornadas dejaron claro que Alfredo Emilio Escobar es el único responsable de las agresiones, la violación y posterior femicidio de Laura “Cielo” López. A pesar de los intentos de la defensa de poner en tela juicio algunas de las pruebas que “no indicaron la presencia de material genético del acusado”, el jurado popular declaró culpable a Escobar por los delitos de: abuso sexual con acceso carnal en concurso real y de homicidio doblemente calificado, por intentar esconder el delito de violación, y femicidio porque existió violencia extrema contra una mujer.

En la audiencia final, el hombre de 29 años, jugó su última carta para probar su inocencia, acusó a un amigo de la violación y femicidio de Cielo López, y dijo que de lo único que es culpable es de ocultar las pruebas en la escena del hecho. 

Sin embargo, su estrategia no alcanzó y el jurado por unanimidad y en solo 40 minutos lo declaró responsable de los delitos por los que la Fiscalía y la querella lo habían imputado.

Durante la última jornada las partes expusieron los alegatos finales. El jefe fiscal, Agustín García, durante una hora recorrió el caso en base a las pruebas expuestas por los 25 testigos que pasaron por el estrado.

Los registros de los telefónos celulares indicaron que el imputado estuvo con la víctima la madrugada del 13 de septiembre del 2019. Según especialistas en el tema, en el celular de Escobar también se registraron intentos de ocultamiento de cualquier información que lo vincularan con Cielo. Sin embargo, en su mayoría, pudieron ser recuperados y fueron aportados al procedimiento judicial.

Un dato crucial, entre tantos, es que el celular de Cielo deja de emitir datos móviles y es apagado en el lugar de los hechos. Asimismo, los profesionales aseguraron que todos los hechos ocurrieron en el domicilio de Escobar. Las pruebas en el terreno así lo indican como también se detectaron maniobras de ocultamiento. 

“El día 14 el celular de Escobar es captado en la zona de Los Espigones, en el lugar donde el 15 encuentran partes de un cuerpo (…)”, detalló el jefe fiscal. 

Un dato no menor es que Escobar fue citado para realizarse la pericia psicológica y psiquiátrica la cual no finalizó por recomendación de su anterior abogada. De igual manera el Dr. Massera (testigo), del Poder Judicial, determinó que era “una persona normal y sabía lo que hacía”.

Por su parte, “el doctor Gordillo, que realizó la autopsia explicó que el cuerpo tenía claros signos de violencia y que resistió el ataque sexual de Escobar”. Las lesiones paragenitales e intravaginales así lo probaron. Además el líquido seminal que se encontró corresponde a Escobar.

“Me hizo acordar a un caso de 2013, el de Ángeles Rawson (…) El desprecio sobre la dignidad de la mujer, Escobar hizo lo mismo”, finalizó el fiscal haciendo referencia a un hecho con la misma metodología machista y de descarte.

A su turno, el querellante Marcelo Hertzriken Velasco enumeró 44 pruebas que revelaron e indicaron la culpabilidad de Escobar y que rectificaron la cronología marcada por la Fiscalía. Velasco insistió en la necesidad de que el acusado es un violador y un femicida que, hasta ayer, era impune.

Por su parte la defensa alegó sobre pruebas que, según afirmó su referente Elio García, no aportaron la suficiente información genética para culpar a su cliente. “Las inconsistencias que acabamos de señalar es larga y quizás algunas fueron observadas por ustedes (el jurado); es por ese motivo que desde esta defensa vamos a manifestar verdadera justicia y la declaración de no culpabilidad de una persona cuya responsabilidad no ha sido debidamente probada”, concluyó el defensor. 

Por último, Alfredo Escobar hizo uso de su derecho y declaró frente a las partes. Acusó a un amigo de ser responsable de la violación y femicidio de Cielo López, y aseguró que él es culpable de intentar solo ocultar los hechos. 

Lo llamativo es que su versión no tiene relación alguna con lo planteado por la defensa en sus alegatos finales ni con el procedimiento judicial. Nada de lo expuesto por el acusado fue usado como estrategia a la hora de probar su “inocencia”.

El femicidio de Cielo López, fue uno de los tres registrados en Neuquén durante 2019. Es el segundo femicidio que llega a juicio en la provincia, (el primero fue el de Noemí Maliqueo) y en el que un jurado popular declara culpable al acusado.