Un libro con otra ternura para conversar la Escuela

Este martes se presentó el libro Conversar la Escuela. Complicidades pedagógicas para otra ternura, coordinado por Belén Grosso. Un glosario de la escuela para pensar y desarmar conceptos. Publicado bajo el sello editorial de Chirimbote junto con ATEN. 

Por Ailin Trepiana

Pájaro con líneas redondeadas alrededor. Dibujo en blanco y negro.
Ilustración de María Reboredo para el libro.

Reír. Pedagogías. Mirada. Leer. Odio. Baños. Silencios. X-Equis. Escuela. Universo. Feminismos. Son algunas de las palabras definidas (o “indefinidas”, tal como se aclara) en el libro Conversar la Escuela. Complicidades pedagógicas para otra ternura, presentado este martes en Neuquén capital, de forma virtual.

Las palabras son disparadores que traen recuerdos, reflexiones, anécdotas, que remontan a la infancia pero también al presente y los debates actuales.

Laura Rodríguez, actual secretaria adjunta de ATEN Capital abrió el espacio: “en el sindicato no sólo se discuten las condiciones laborales. Tenemos que promover discusiones pedagógicas, resignificar palabras, palabras que circulan en la escuela y también instalarlas”.

Ruth Zurbriggen, Brenda Stolze, Mariano Skliar y Andrea González son quienes se encargaron de escribir sobre ellas a su gusto en un ciclo virtual que devino libro, también contiene un diálogo con Carlos Skliar.

“Dije que lo iba a decir muchas veces y lo voy a hacer: esto es una construcción colectiva”, remarcó Belén Grosso, coordinadora de la publicación, y secretaria de Políticas de Género del sindicato y activista de la colectiva La Revuelta. Y al igual que con otras iniciativas, el libro surgió “de un deseo colectivo que quiere impulsar discusiones en las escuelas”.

El contexto en que surgió la idea de materializar el libro no fue cualquiera: en plena pandemia de coronavirus, con clases virtuales e intentando garantizar, de la mejor manera posible, el vínculo docente-estudiantil. Fue así que, en palabras de Grosso, pensó: “hay que hacer algo que nos salve de ese tiempo de aislamiento y que nos ayude a sopesar el dolor, las muertes y los duelos”, por lo que “necesitaba corporalmente que fuera desde la ternura, desde la fragilidad propia del tiempo en el que estábamos”.

Esa misma ternura con la que Ariel Pino, secretario general de ATEN Capital, recordó a Carlos Fuentealba en el prólogo: “Con la ternura como bandera, le ponemos palabras a la escuela pública. Nos sumamos a las voces de les compañeres que en este libro se animan a nombrar de nuevo y nos empujan a mirar de costado, patas para arriba. ATEN, nuestro sindicato, se inscribe en ese andar solidario y colectivo. Desde la ternura soñamos la escuela. Desde la ternura recordamos a Silvia y a Carlos. Y desde ese sentir, profundamente político, también exigimos justicia”.

 

Suspensión en el aire

Un corazón adentro de una casita. Dibujo en blanco y negro
Ilsutración de María Reboredo para el libro.

La profesora Beatriz Greco fue invitada para comentar la lectura del libro y, durante la presentación virtual frente a decenas de docentes, compartió sus sensaciones. Y entonces ya no habló de definiciones ni de indefiniciones. “Es un libro de conversaciones arriesgadas más que de definiciones”, dijo.

También compartió que su lectura la llevó a otro lugar, “a un lugar de escuelas que van a venir, que están viniendo, a nuevos encuentros con las escuelas físicas, las aulas, los pasillos, los baños, los abrazos”. Y aportó más sobre su significado: “Es un libro de palabras cuerpo, de palabras rebeldía, de levantamiento, de sublevación. Es un libro movedizo, inquieto, que no se queda en un lugar, que se abre con una hospitalidad conmovedora pero también se opone, lucha, hace ruido para que lo escuchen”.

“Ustedes proponen en sus conversaciones palabras que juegan y en ese juego se oponen a la domesticación, hablan un lenguaje igualitario. En la afectividad que resuena entre las palabras hay potencias para resistir a la dominación, relaciones entre sujetos, sujetos y entornos. Cuerpos, tiempos. Resiste a los binarismos humano-no humano, público-privado, interno-externo”, agregó Greco.

¿Puede ser político un afecto? El libro entero responde que sí”, culminó. Y pasaron varios segundos de suspensión en el aire hasta que Mariano Skliar quebró el silencio: “No sé si a alguien le pasó lo que me pasó a mí escuchando a Beatriz. Acá en mi casa como que se paró todo, dejaron de correr los perros que estaban corriendo, el mate se puso de costadito. Si a alguien le pasó eso, esa interrupción, esa suspensión, a mí es lo que me ha venido pasando con el libro”.

“Este libro está hecho de palabras y de ilustraciones re lindas y ahora me quedo con pocas palabras. Me parece que eso que yo siento es que voy viendo que  esas palabras que están en el libro en verdad no son de nadie, ni siquiera son de quienes las escribimos. Son como esas flores que van saliendo, volando, y lo que generan es la expectativa de algo que puede llegar a venir”, sumó.

Por su parte, Ruth Zurbriggen confió: “Estoy muy emocionada pensando cómo es esa lectura que se hace del texto, eso que fuimos poniendo ahí. No escribimos en el vacío social, no son nuestras tampoco todas esas palabras, son definiciones o un boicot a las definiciones que también hemos ido construyendo en una experiencia colectiva. En esa experiencia vamos sumando voluntades para pensar y hacer esa otra escuela que queremos y que deseamos”.

En línea con Skliar, Andrea González aportó: “Pensaba que era un silencio no solo de quien quiere escuchar sino también del hacer silencio hacia adentro, de lo que movió a cada quien el libro. Mi expectativa era muy grande, pensando en cómo esa conversación que se tramó en un tiempo muy difícil para mí, fue muy alentador y muy movilizador”. Y se preguntó: “Qué conversaciones producirá una vez que el libro comience a andar?”.

También estuvo presente Brenda Stolze, otras de las docentes feministas autoras del libro y María Reboredo, diseñadora e ilustradora.

“Todo el tiempo me pensé niña en la escuela, en esos pasillos enormes de mi escuela en Bahía Blanca. Me pasó todo el tiempo de traer la experiencia y lo que decía Ruth, que estas definiciones son todo lo que hemos aprendido y estamos aprendiendo permanentemente de quienes escuchamos, de quienes leemos. Me pareció que la ternura nos ha atravesado desde principio a fin, una ternura que es política y que nos hace pensar que la escuela debe ser más justa”, compartió Stolze sobre el modo en que atravesó la escritura del libro.

Por su lado, María Reboredo dio cuenta de las decisiones que fue tomando a partir de encontrarse con el material, las complejidades que se le presentaron y cómo proyectó el armado de cada una de sus páginas a partir de las provocaciones que la lectura le produjo y en diálogos con sus autorxs. Y cómo es que se le ocurrió trabajar con imágenes con estilo xilográfico. 

Este viernes, en horas de la tarde, el libro se presenta de manera presencial, en una actividad organizada por ATEN San Martín de los Andes y el próximo miércoles 22 a las 18 hs, en el Instituto Superior de Formación Docente N° 12, ubicado en Anaya 295, de la ciudad de Neuquén. Para participar de esta presentación hay que inscribirse previamente en: https://forms.gle/82cSG34QnF4P12hq8

ATEN Capital comenzó la entrega del libro en las bibliotecas de las escuelas.

Se puede adquirir a través de la Editorial Chirimbote y de Colectiva Feminista La Revuelta.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *