NINA, el film de Sofía Vaccaro que denuncia la Trata de Mujeres para ser explotadas sexualmente, se presentó en la región entre el 22 y 25 de septiembre de 2009. Las actividades fueron organizadas por la Colectiva Feminista La Revuelta y Sin Cautivas, quienes activamos articuladamente en la Comisión No a la Trata. Convocó a una amplísima concurrencia ávida por sumarse –de una manera u otra y con distintos aportes- al trabajo contra la Trata.

La proyección fue una excusa más para seguir poniendo en entredicho la cultura que naturaliza la prostitución de las mujeres, niñas y niños, ésa en la que “ir de putas” se convierte en una prerrogativa masculina para sentirse y hacerse “machos” con todas las de la ley. Es que tampoco se nace varón, sino que se llega a serlo, atreviéndonos a tomar y extender aquella punzante y célebre formulación de la filósofa Simone de Beauvoir: “no se nace mujer se llega a serlo”.

“En materia de trata, debería perseguirse penalmente a los clientes de prostitución: son violadores con todas las garantías”, consideró Eva Giberti, (en Página 12 - 23/09/09). Allí la especialista sostiene que en estos temas resulta imperioso indagar y castigar a los clientes consumidores de prostitución. Así, destaca por ejemplo lo que se encadena en los avisos publicitarios que ponen a disposición cuerpos de mujeres: “Algunos argumentan que podría ser censura previa, pero sabemos que los avisos que piden chicas para castings, una forma de reclutamiento de redes de trata, desbordan los límites, son casos de inducción a situaciones de riesgo. Muchos avisos de oferta de sexo dicen ‘colegialas’, ‘chiquitas’. Aunque en la realidad no sean menores de edad, instalan simbólicamente en el imaginario que es aceptable y recomendable que un adulto tenga sexo con una niña. Se sabe que es ‘mercadería’ buscada porque garantizan el buen estado de salud genital, sexual. Es inducción al delito. Las autoridades editoriales de los diarios que publican este tipo de anuncios deberían tomar medidas, actuar. Queda a la vista que esos diarios están regulados por la conciencia del mercado, que a su vez está regulada por la conciencia de los clientes. Desembocamos siempre en lo mismo: los clientes”.

También sirvió de excusa para continuar exigiendo la aparición con vida de las más de 500 jóvenas secuestradas y desaparecidas en esta democracia insustantiva y el desmantelamiento de las Redes de Trata y Prostitución, cuya existencia es posible por la maraña de complicidades existentes en este capitalismo prostituyente y heteropatriarcal, en que funcionarios y poderes gubernamentales se hallan implicados a través de diversos dispositivos. Las situaciones de vulnerabilidad social y pobreza económica allanan el camino a este negocio internacional que se acrecienta año tras año y que produce ganancias multimillonarias.

>Gabriela Rodríguez, jefa de la OIM (Organización Internacional de Migraciones) en Chile, argumenta que “en general la víctima no tiene control sobre su vida, no tiene documentación porque el traficante se la quita, tiene deudas que nunca logran ser pagadas, es presionada o vinculada a otros delitos como el narcotráfico”.

Estos temas con sus innumerables aristas fueron los que estuvieron presentes en los debates que se suscitaron entre y con estudiantes del Colegio San Martín y del CPEM 47, en los que gracias al compromiso de varias/os docentes la película pudo ser vista en ambos turnos. También hubo una proyección en el colegio de Fernández Oro al que asistía Otoño Uriarte motorizada por Roberto Uriarte, quien sigue exigiendo justicia para su hija.

El viernes 25, en horas de la tarde, el cronograma previsto indicaba la proyección en la  Colonia Rural Nueva Esperanza. Allí compañeras y compañeros de la Fundación Hueché participaron activamente para sumar a la convocatoria a las vecinas y vecinos de la llamada Meseta. Terminada la proyección sobrevinieron relatos conmovedores de jóvenes mujeres que contaron sus experiencias cuando fueron obligadas a prostituirse: por una pareja en algún caso; por los “anónimos” de siempre en otros.

La semana de intenso trabajo concluyó con el Aula Magna de la Universidad Nacional del Comahue repleta de gente. Allí también se conversó con Sofía Vaccaro, en especial sobre el proceso de construcción de la película y su acercamiento al tema. Como insistió Vaccaro estos días en su estadía por Neuquén: la película pretende ser un aporte a la lucha contra la Trata de Mujeres para ser prostituidas.

El interés suscitado, especialmente por parte de trabajadoras y trabajadores de la educación de distintos puntos de la provincia, para avanzar con nuevas presentaciones en colegios, nos alienta a pensar en las posibilidades que se siguen abriendo para impulsar la inclusión de esos temas, muchas veces evadidos, pero altamente necesarios en nuestro trabajo político pedagógico.

Síntesis del film

NINA es una joven que vive en una granja junto a su madre y sus hermanos pequeños en Oberá, Misiones, trabajando como empleada doméstica.

Lourdes es menor y su padre, que la golpea, la manda a trabajar como vendedora en una feria de Encarnación, Paraguay. Las dos chicas, sueñan un futuro diferente y aceptan una oferta para trabajar como niñeras en Posadas.

Ambas, son engañadas, tal empleo no existe y son prostituidas. Como en muchos casos, la propuesta les llega por una persona conocida.

Si te interesa contactarte por la película, escribinos a colectivalarevuelta@gmail.com

Colectiva Feminista La Revuelta
Neuquén, 4 de octubre de 2009

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